¿ES EL VENDEDOR UN “SUPERMICROMARKETINISTA”?
Hace muchos años, se comentaba que “los de Marketing” eran los que iban con traje y corbata, estaban siempre en sus despachos y no vendían un rosco, mientras que “los de Ventas” eran los que iban a su aire, ganaban mucho y se comían las gambas con los Clientes 😊. Afortunadamente esta dicotomía se ha ido diluyendo.
Enseguida se estableció la diferencia entre el Mapa y el Territorio. Y cómo uno no tiene sentido sin el otro.
La función Marketing ejecuta un trabajo sumamente importante. Planifica como un Estado Mayor. Identifica y produce tendencias, ubica segmentos y orienta la creación de bienes en forma de productos y/o servicios que, en principio, deberían colmar las expectativas de los consumidores a los que van dirigidos. Y analiza continuamente los resultados para ver dónde se producen errores y áreas de mejora para conseguir un mejor posicionamiento y con ello una mayor penetración. Traza los Mapas.
En Ventas, mientras tanto, operamos sobre el terreno como Cuerpo de Operaciones Especiales. Un lugar en el que la información que nos facilitan desde Marketing, aunque nos aporta una valiosa orientación general, no nos puede señalar el detalle. Además de las “gambas” y las oportunidades, también está el barro, los árboles caídos; los obstáculos y los caminos alternativos viables. Cubrimos el Territorio y en el mismo y sobre todo ello, como Vendedores experimentamos el enorme placer de “poner la bandera” en el pico más alto.
Marketing y Ventas han de trabajar unidos, cada uno desde su cara de la misma moneda; ambas interactuando en busca de un objetivo común. Más cuota de Mercado. Más Ventas. Más Clientes vinculados.
Para ello, como Vendedores, tenemos que ser un auténtico especialista en el Marketing del Individuo. Saber diferenciar el Segmento de la Persona y las tendencias generales de consumo por las necesidades, deseos y sueños de cada Cliente. Con sus experiencias, sentimientos y aspiraciones de todo signo. Sus razones y sus emociones únicas.
En la cercanía de la Venta, cada Comprador es una singularidad. Constituye todo un Mundo complejo, rodeado hoy de infinidad de Ofertas donde elegir. Ahí es donde desarrollamos nuestra actividad como Vendedores Profesionales; investigando, entendiendo, comprendiendo, empatizando, creando, resolviendo. Formándonos y transformándonos continuamente para poder ser un experto en cada uno de nuestros Clientes y estar en condiciones de brindarle, siempre, en cada contacto con él, una posibilidad de mejora en su vida personal/profesional a la que confiera Valor. Hoy un Vendedor ha de ser un auténtico “super micro marketinista”.
Estoy totalmente de acuerdo Alfonso, un saludo de un vendedor
Gracias por tu comentario Alfonso!!